La labor de las mujeres en defensa del medio ambiente sigue en un segundo plano en la mayoría de países del mundo, prueba de ello es que sus actividades, a pesar de tener tanto o más peso que la de los hombres, se desconoce.
En el marco de la celebración este miércoles del Día Internacional de la Mujer, la portavoz de la ONG Alianza por la Solidaridad, Rosa María Tristán, ha explicado en entrevista con la Agencia EFE que debido al patriarcado con el que conviven aún las mujeres en América Latina, el trabajo de muchas activistas mujeres no tiene visibilidad en el continente.
La ONG ha informado de que cada día se suman más mujeres a la defensa de los recursos naturales, en especial entre los grupos indígenas en América Latina, aspecto fundamental para el desarrollo de las comunidades.
Sin embargo, cuatro de cada diez personas agredidas por defender los derechos humanos en Guatemala son mujeres que promueven los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales en sus territorios, ha añadido Tristán.
Actividad extractiva
El catedrático de economía de la Universidad Autónoma de Barcelona y experto en ecología política Joan Martínez Alier en declaraciones a la Agencia Efe desde Bolivia el pasado fin de semana, alertó de que el incremento de la actividad extractiva en América Latina pone en peligro sobre todo a las comunidades locales y las economías de los países andinos.
El experto advirtió de que son las mujeres las que suelen encabezar los movimientos de protesta, sobre todo de poblaciones indígenas, ya que la extracción de materias primas “afecta a la supervivencia de las comunidades de una manera muy directa”, más aún cuando los temas afectan a la expropiación de tierras y al agua.
El recuerdo de algunas activistas y su labor en defensa del medio ambiente es obligatorio, aunque muchos nombre se quedarán fuera.
Honduras y el río Gualcarque
La defensa del agua del río Gualcarque se cobró la vida de la líder lenca y activista del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH), Berta Cáceres, quien fue asesinada en marzo de 2016, tras años de recibir amenazas por oponerse al proyecto hidroeléctrico de la presa Agua Zarca.
Cuatro meses más tarde moría también asesinada en Honduras, su compañera de organización, la dirigente ecologista Lesbia Yaneth Urquía, cuyo cadáver apareció con un golpe en el cráneo.
Petra Kelly, fundadora de Los Verdes
Cambiando totalmente de ámbito y continente, la alemana Petra Kelly, fundadora del Partido de los Verdes y diputada en el Bundestag por esa formación, moría a los 44 años tras dedicar su vida a la defensa de la paz y el medio ambiente.
En mayo de 1983, Kelly apoyó el Manifiesto de Tenerife, que sirvió de documento precursor para la formación de los Verdes en España. En aquel año, tras el triunfo del PSOE en las elecciones de 1982, surgió la polémica sobre la pertenencia de España a la OTAN.
En junio de 1979, la activista y ecologista Gladys del Estal Ferreño moría en Tudela (Navarra) por un disparo de la policía en una protesta antinuclear.
Las mujeres “están en el terreno”
Tristán ha explicado que en el caso de América Latina, aunque son los hombres los que dan la cara, “son las mujeres las que hacen el trabajo, las que están en el terreno defendiendo su tierra, sus ríos, su agua, frente al expolio de las grandes empresas, que están llegando a sitios que hasta ahora no habían tenido mayor interés”.
“Son las mujeres las primeras, las que salen a defender lo suyo, las que mantienen la llama de las protestas. No son las grandes líderes pero están ahí”, ha asegurado.
“Cuesta mucho más dar visibilidad al trabajo de las mujeres”, ha sostenido. Ha añadido que como en muchas de las campañas que la ONG ha denunciado en Guatemala con su proyecto TieRRRa (responsabilidad de las empresas, rentabilidad y recursos -que son aquello de los que nos provee el planeta para vivir con dignidad-), cuando se les quita el agua para hacer hidroeléctricas, son las mujeres las que mayores dificultades tienen para conseguirla, porque tienen que recorrer más kilómetros para conseguirla.
“Eso genera que sean más amenazadas, incluso dentro de sus propias comunidades”.
Otros ejemplos de activistas que siguen trabajando en pro de sus causas son la guatemalteca Rigoberta Menchú, la británica Jane Godall, entre otras, sin embargo, la mujer actualmente trabaje en múltiples activides en defensa del medio ambiente, de los recursos naturales, del planeta. Efeverde

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