Una de las razones que me llevaron a incorporarme al proyecto de MPC Ambiental estaba relacionada con la respuesta a esta pregunta: ¿por qué seguimos con un sistema de recogida de residuos urbanos, que apenas ha evolucionado desde su nacimiento?
Desde mi punto de vista, hoy en día, nuestro sistema de recogida de residuos es ineficaz y claramente mejorable.
Es muy posible que en 1997, en su nacimiento, los SIG fueran la mejor alternativa, pero de esto hace ya la friolera de 19 años. Durante este tiempo se han producido avances tecnológicos que pueden ayudar a mejorar los resultados actuales.
El sistema actual depende de factores que él mismo no puede garantizar: en primer lugar, que los usuarios tengan la voluntad de separar en origen y en segundo lugar, que lo hagan correctamente.
El tema de la sensibilidad individual es algo difícil de valorar. Todos tenemos que contribuir a mejorarlo dando ejemplo y educando, especialmente a las generaciones más jóvenes, que suelen ser más receptivas en estas materias.
Sobre el segundo aspecto, es cierto que mucha gente, pese a querer hacerlo bien, sigue teniendo dudas sobre dónde depositar cada residuo generado en su domicilio. Y si no lo hace correctamente, las consecuencias son las mismas que si no hiciese separación alguna: encarecimiento del proceso de reciclaje, aumento de emisiones contaminantes y, en un porcentaje muy elevado, depósito de los residuos en vertederos.
Ante un sistema que depende fundamentalmente de la actividad humana, surge una pregunta: ¿es posible automatizar este proceso para minimizar los errores?
En los centros de tratamiento existen máquinas que ayudan a separar los distintos tipos de residuos, pero una gran parte del proceso sigue siendo manual.
Las peores cifras de reciclado son las correspondientes al contenedor amarillo: el de los envases. Y es curioso, porque actualmente, la tecnología ya nos permite disponer de equipos automáticos de separación en origen de envases, que garantizan materiales correctamente separados por los propios usuarios. Estos equipos complementarían y optimizarían nuestro actual sistema, ya que los centros de tratamiento ya recibirían los materiales separados por tipos. Ello contribuiría a un sistema mucho más rentable en todas sus facetas: económica, medioambiental y social.
Y hay algo más, ¿es mejor castigar a quien no recicla o lo hace mal o premiar al que lo hace bien? Pues estos equipos también pueden entregar un incentivo que sirve para motivar a todos a esforzarse por preservar el medio ambiente.
Para terminar y volviendo al título de esta entrada, si en todos los ámbitos de la vida se han adoptado las nuevas tecnologías para innovar, optimizar y rentabilizar tanto modelos de negocio como procesos productivos (sólo tenemos que mirar a nuestro alrededor: telefonía, distribución, alimentación, industria…) y nos parece natural, en el tema de los residuos ¿por qué seguimos con el mismo sistema desde hace 19 años?
Enrique de la Fuente
Director de MPCambiental
Link: http://mpcambiental.com/wordpress/2012/04/residuos-urbanos-por-que-seguimos-con-el-mismo-sistema-desde-hace-15-anos-2/